La escuela de Arquitectura de A Coruña para finalizar la acogida de los futuros arquitectos contrató un espectáculo en el que dos estripers ofrecieron una performance en la que se iban cambiando de ropa. Se fueron quitando las prendas hasta quedarse con el pecho descubierto (solo disimulado por unas pezoneras) y unos culotes; para, a continuación, volverse a vestir con ropa más informal.
Una estriper iba vestida de soldado y la otra estriper con un mono de obra. Como la ropa les oprimía y les impedía respirar, se cambiaron de ropa simplemente, se sacaron la que tenían y se pusieron otra ropa más cómoda.
¿Y por esto se monta un follón?
